viernes, 6 de junio de 2008

Crossower: Hellsing/ La llamada de Cthulhu II

1ªParte: Lo que no debería existir.

La serpentaria ardía invocando con su humo la presencia de los dioses de nombres olvidados, en forma de flujos astrales que violaban a la anciana mulata mientras saboreaba la amanita muscaria, haciendo que entrara en la exegesis, participando en el orgasmo de los dioses para así que sus incorpóreos amantes susurraran en su oido, en medio de tal trance, alguna insípida pura verdad. La mulata mas joven, su hermana, miraba excitada el ritual, mientras luchaba por controlar la compostura por ante el maremagno sexual que se respiraba en el ambiente, residual de una orgía de la que no se participaba en este mundo, tras el éxtasis la anciana cayo agotada para decir con la palabra y el fuego las palabras de aquellos seres que había invocado.

-Tras cruzar océanos de tiempo (*) llegara en sábado-dijo la anciana delirando.

-¿Quién hermana? ¿Es quien nos librara del Baka-Pez (**) ? Y si es así ¿Quién es?- pregunto la joven mulata desesperada.

-Un príncipe, un conde, un barón- respondió la anciana dejando casi todas sus fuerzas en el aliento-llegara en sábado... (***)

La joven mulata abrazo a su anciana hermana ayudándola a pasar el shock causado por sus visiones, llorando por ella ya que ella se había prohibido llorar, una vez secas sus lagrimas miro hacia los ojos de su hermana y contesto.

-Que así sea.

Las dos mulatas se abrazaron y se encomendaron a sus dioses para que aquella cura que enviaban a su enfermedad no resulta también veneno...

Pasaron pocos días cuando Jonas ya se encontraba somnoliento en uno banco del puerto de Nueva Orleáns esperando, toda la tarde-noche del viernes esperando hasta que las campanadas de las doce le despertaron, y la espectral figura que había frente si le espabilo con solo su presencia, efecto de ese aura terrorífica que dependía

-Jonas Stevnson ¿me equivoco?- pregunto el “hombre” disfrazado de figura, o “figura” disfraza de hombre.

-Si...soy yo-respondió con sinceridad entre un tartamudeo nacido de un terror sobrenatural.

Esa figura “humana”, vestía de negro con un lazo rojo sangre por corbata, abrigándose con una gabardina que hacia juego con el lazo y un sombrero de copa negro, con unas gafas de sol redondas que le daban aspecto de enterrador, que no era lo mas aterrador de su aspecto sino esa sonrisa, perversa sonrisa alimentada por el placer que le causaba todo aquel terror que le rodeaba y, que seguramente, causaba.

-¿Podría encargase de mi equipaje?-le pedio la figura simulando educación mientras le señalaba un gran ataúd negro con extrañas inscripciones griegas que llevaba en un carrito- he tenido un viaje largo y estoy cansado.

-Claro sir Hellsing-respondió atemorizado mientras se hacia a las riendas de ese fúnebre equipaje, el “hombre” se echo a reír.

-Disculpe, a habido un mal entendido-dijo la figura.

-¿Cuál sir Hellsing?

-Que no soy Sir Arthur Hellsing, solo soy su siervo en esta misión.

-Disculpe pues señor, pero el Dr Armitage no me dijo que usted sustituiría a su amo ¿Podria saber entonces su nombre señor...

-Alucárd- respondió antes que pudiera terminar sin perder esa macabra sonrisa- me llamo Alucárd, y me encuentro cansado así que cuanto antes lleguemos a la posada mejor.

No se dirigieron palabra mientras caminaban al hostal donde el Dr Armitage había alquilado las habitaciones, Jonas no para de pensar en su estrafalario compañero, y en su aterradora sonrisa, que se le antojo tan aterradora como una calvaza vacía de Hallowen, iluminada en su interior por una vela, o mejor aun, como la de una clavera, si como la de una calavera, así le parecía, sin músculos en la cara su expresión parece sonriente a pesar de ser presa de la inerte muerte, la verdad que esta macabra asociación de ideas le pareció acertada, un rostro pálido como el mármol con gafas de sol imitando las cuencas vacías que tiene una calavera por ojos y su sonrisa imborrable, si era eso lo que le asusto de su aspecto y ningún tipo de fuerza sobrenatural que sintiese sobre el, este razonamiento le resulto lógico incluso le hizo sonreír ante el los intervalos de silencio incomodo que había entre el ruido de las pisadas.

Ahora se dio cuenta de una cosa, las pisadas, el ruido que marcaban eran de dos hombres eso estaba seguro pero uno mas lejano que el otro, pudo escuchar sus pisadas como las mas cercanas , pero las otras lejanas, eran detrás de ellos, según el ruido en una distancia razonable como para deducir que...

-Nos están siguiendo- escucho Jonas la voz de Alucárd no en su oídos sino en su cabeza.

-¿También lo has notado?-pregunto Jones con un tono de voz susurrante.

-Mi querido Jonas-respondió mientras sonreía- lo sabia incluso antes de saliéramos del puerto.

Jonas se quedo estupefacto ante su respuesta, si que pudiera reaccionar veía como su compañero se daba la vuelta mientras desenfundaba un pistola, vio la figura de la sombra de un lugareño que les seguía reacciono ante este gesto saltando hacia el de una forma sobre humana, ante la poca capacidad de reacción de Jones ante la situación pudo girarse para ver el rostro de su acosador y posible agresor, pero no era un rostro humano, sino otra cosa, un rostro mas similar al de un batracio que el de un humano, como una mascara de carnaval viva, tan estrambótica, tan aterradora, mas que el “rostro calavera” de su acompañante, esa iba a ser una imagen que le iba a tener gravada en su memoria durante mucho tiempo, un pestañeo y volvió a ver aquel rostro de pez podrido explotando como una piñata de entrañas y sangre tras recibir un disparo de su compañero, la sangre cayo como una “agua va” sobre ellos, Jones miraba su manos manchadas de sangre mientras sentía como esta se deslizaba por su frente, se echo las manos a la cara y callo al suelo, aguantándose las lagrimas, evitando que su vejiga se vaciara por el terror, mientras sentía como si estuviera siendo engullido por una especie de sombras orgánicas que no mejoraba su estado emocional, cuando no pudo mas, cuando empezó a llorar escucho la voz de su compañero llamándole.

-Jonas, levantese.

Jonas abrió los ojos, no había ningún rastro de sangre ni del cadáver, solo su compañero de pie observándolo con su imborrable sonrisa.

-Tiene que guiarme hasta mis aposentos.

No volvieron a dirigirse la palabra durante el trayecto restante, y Jonas intento evitar pensar en su compañero y en ese suceso, también lucho por intentar en balde borrar ese rostro putrefacto de híbrido entre humano y pez. Una vez en el hostal llevo a Alucárd a su habitación quien le deseo buenas noches antes de meteré, Jones antes de irse le escucho recitara entre una pequeña risita que podía atribuir de diabólica los siguientes versos:

-No esta muerto lo que eternamente yace...

Jonas se tiro en la cama de sus habitación y se puso a pensar en todas las viscitudes de aquella noche, ¿dónde se encontraba amarrado el barco de Sir Alucárd? ¿cómo podía escuchar los pasos de su perseguidor y no los de el si se encontraba a su lado? ¿quién o que era su acosador? ¿cómo pudo desaparecer un cadáver reventado y todo el rastro de sangre? ¿de verdad oyó la voz de Alucárd en su cabeza o era efecto de la situación de tensión? No encontró respuesta a ninguna de ellas así que no pudo hacer otra cosa salvo pasar despierto toda la noche mientras se le aparecía en su mente las imágenes de mascaras de carne y escamas, de calaveras sonrientes, de calabazas huecas de Halloween, y en la aterradora sonrisa de payasos ahorcados...

“El mensajero del miedo esta cerca.

El engaño tenebroso ahoga la luz.

Los hijo híbridos miran al mar.

Rezan para que padre ande libre...


...despréndete de la razón.

Enfréntate a lo que no debería existir”

-Metallica (The thing that shold not be).


Continuara...

*Cita extraída de Drácula

**Los “Baka” son los espíritus invocados por el vudu.

***Barón Samedi, loa (dios) de la muerte y la sexualidad, puede significar Barón Sábado.

1 comentario:

Nómada dijo...

Muy buena entrada, quiero más. xD